¡Saludos urgentes! Es urgentísimo que para que salgamos de los últimos lugares en que estamos, de acuerdo a la ENCUESTA PISA, los mexicanos nos convirtamos en lectores y amigos del libro. 

También es urgente que ese proceso lo iniciemos en las tempranas edades de nuestros hijos con una ventaja muy grande: VAMOS ADQUIRIENDO EL ÚNICO MÉTODO DE TRANSFORMACIÓN PERSONAL: Ese método se llama AUTODIDACTISMO y otro dato más es que nos iniciamos en la CONCEPTUALIZACIÓN. 

Leamos el cuentecillo que los maestros con habilidad y con esfuerzo pueden dramatizar “Este cuento necesita 8 minutos para ser leído, dirigido a niños de 7 años. Los lugares donde se desarrolla son: Casa de la hilandera y palacio. Algunos de los valores que se desarrollan son: cumplimiento de la palabra dada y agradecimiento. 

“Érase una muchacha, hija de hilanderos, a la que no le gustaba nada hilar. Por más que su madre le repetía que debía trabajar, la joven no movía un dedo. Un día, la madre se hartó tanto de ver a su hija hacer nada que le dio un sonoro bofetón, mientras le decía: -¡perezosa, holgazana! ¡vaga, más que vaga! En ese mismo momento, coincidió que pasaba por allí la reina. Al oír el llanto de una joven, se bajó de la carroza y se acercó a la casa. La madre avergonzadísima de tener una hija tan vaga, ocultó la verdad y dijo a la reina: -majestad, mi hija llora porque no tiene lino para hilar. Trabaja tanto que no puedo comprar todo lo que ella necesita, ¡Somos pobres, señora!  

Entonces la reina exclamó: -¡No hay nada que más me guste que el ruido que hace la rueda al hilar! -y siguió  hablando- ¡qué suerte tiene usted de tener una hija tan trabajadora! Sin lugar a duda, es la cualidad que más aprecio en las personas. La reina acarició la cara de la joven y dirigiéndose a la madre, le dijo: - señora, deje que su hija venga conmigo a palacio; Ahí tengo tres montañas de lino para hilar. A mí me hará un gran favor y ella se va a divertir mucho. La madre aceptó encantada y la reina se llevó a la joven. 

En cuanto llegaron al palacio, le enseñó las tres habitaciones llenas de lino y muy sonriente dijo: -aquí tienes trabajo para unos cuantos días. En cuanto acabes, yo te daré por recompensa la mano de mi hijo. No importa que seas pobre: Una mujer trabajadora es la más rica del mundo. Cuando la reina se fue, la joven volvió a mirar las tres montañas de lino que tenía para hilar. Sólo de imaginar el trabajo que ahí había, le sudaban las manos, entre suspiro y suspiro, exclamó: ¡Ni en diez vidas que tuviera sería capaz de hilar tanto hilo! 

La joven se echó a llorar y estuvo sin mover un dedo los tres días siguientes. Pasado este tiempo, la reina se presentó a ver lo que aquella muchacha había hecho. Al no ver absolutamente nada, le preguntó: -¿Por qué razón no has empezado a trabajar? La joven contestó lo primero que le vino a la cabeza: -Majestad, es que me acuerdo mucho de mi madre y estoy muy triste. La reina que tenía un gran corazón, sintió pena por la joven y la tranquilizó: - Muchacha, no llores más y ponte a trabajar inmediatamente. Como hilar te gusta mucho, seguro que olvidarás la pena de no estar con tu madre...” Nos leeremos en la próxima. 

El Pilón Filosófico: “Los cuentos infantiles siempre serán útiles”. 
Editorial: Silver Dolphin. Precio: $300. Capturista: Mónica Caballero.
 

Por Prof. Jorge Gordillo

Escrito en Opinión el 11/2/2024 · 06:00