Valeria Stoopen y su libro “Las cosas que no nos dijeron (y otras que sí, pero no son ciertas)”.
La famosa columnista y blogger publica su primera obra en la que invita, sin miedo a decir lo que piensa, a confrontar los paradigmas con los que creció toda una generación
Valeria Stoopen es la pluma mordaz que está detrás del blog de “L’amargeitor”, lugar donde comparte sus columnas en las que habla sin reservas de las verdades de la vida desde la perspectiva de su contexto personal.
Querida por la audiencia gracias a su humor, a su lenguaje relajado y a su manera de confrontar las situaciones cotidianas, Valeria Stoopen acaba de publicar su primer libro titulado “Las cosas que no nos dijeron (y otras que sí, pero no son ciertas)”.
La también columnista de diversas revistas digitales como MOI y Cuestione debuta con una publicación impresa dedicada a todo aquel que esté dispuesto a cuestionarse lo establecido en todos los ámbitos de la vida; el trabajo, la amistad, la vida en pareja o la soltería. Para platicarnos más sobre su proceso de convertirse en escritora de un libro, Valeria ofreció una entrevista a Periódico AM.
¿Cómo fue la transición de escribir por entregas a escribir un libro completo?
Siempre he publicado columnas en el Huffington Post, en la revista Sobrevivientes MX y ahora en Cuestione.
Definitivamente, es muy diferente, aparte de la extensión, mi trabajo siempre se publica en un medio digital y ver todas esas páginas impresas fue como un shock de “cómo crees que yo escribí todo esto” Tenerlo ya como el producto terminado en formato libro sorprendente.
Ya que la mayoría de tu trabajo está en medios digitales, ¿por qué consideras que es importante seguir haciendo libros físicos?
Soy amante de los libros, soy una lectora asidua y voraz, creo que en gran parte me defino a mí misma a través de los libros. Siempre, en cualquier conversación que tenga con quien sea, me voy a referenciar con un libro.
Para alguien que escribe regularmente tener un libro es el siguiente paso. Un libro te pone en otro nivel.
Hay una gran comunidad detrás de L’amargeitor, ¿cómo influyó esta comunidad para el contenido del libro?
Influye saber que ya hay alguien que me lee, si supiera que nadie me lee me costaría más trabajo haber iniciado un proyecto así. La parte de saber que ya tengo una base asidua de los lectores a mis intensidades, pues definitivamente fue un aliciente.
¿Cómo has sentido la recepción de todas estas reflexiones que pueden ser confrontativas para algunas personas?
Súper bien, se me informa que se ríen mucho, que la pasan bien, que se lee fácil y que hay algunas partes en donde hay que ir por unos kleenex. Me da mucha emoción porque nada de eso fue intencional, pero sin duda hay partes que yo escribí divirtiéndome y hay partes que escribí llorando entonces si se logró el efecto.
Como en “Como agua para chocolate” de Laura Esquivel, en donde la comida absorbía el sentimiento de quien la preparaba.
Dentro de los temas que hablas destacas mucho la autenticidad en el trabajo, la importancia de ser auténticos, ¿de qué manera plasmaste tú tu autenticidad en este libro?
El libro es yo de principio a fin, no es un documento científico, ni está sustentado en absolutamente ninguna teoría real de nada, es mi muy humilde opinión. Está sustentado 100% en quién soy yo.
Si pudieras definir tu libro en tres palabras, ¿cómo lo definirías?
“¿Por qué no?, “¿Por qué sí? Y “A lo mejor”.
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